14 de diciembre de 2007

ARLEQUÍN SE VUELVE ARGELINO

CRISTINA GONZÁLEZ SÁNCHEZ (Informativos Telecinco.es)

La inmigración como principio y fin. La vida y el sometimiento como protagonistas. Este es el meollo de 'Argelino, servidor de dos amos'. Lo último de la compañía Animalario. En esta ocasión, Alberto San Juan no se ha subido sobre las tablas para dar lo mejor ante su público, pero ha regalado su adaptación de la obra original de Carlo Goldoni (Arlecchino, servidore di due patroni).



La obra de Carlo Goldoni como excusa para poder contar…
Esta adaptación es un encargo de Andrés Lima. El me pidió que escribiese la versión de la obra de Goldoni. Los protagonistas son la lucha entre amos y criados, la infraestructura social que hemos creado y la dificultad de convivir siempre sometidos los unos a los otros.
¿Sacada de la comedia del Arte para denunciar el drama de la inmigración?
Argelino es un inmigrante que llega en patera a Venecia y se tiene que enfrentar la lucha por la supervivencia. Se enfrenta al hambre y a la necesidad de buscarse la vida en otro país. El fondo es la denuncia del sistema de explotación de unos por otros.
¿Para usted la vida es una patera?
Es una frase de Andrés Lima. Él tiene la costumbre de decir que la vida es un barco, y, en este caso, es una patera. Es una metáfora muy utilizada por él que acompaña bien a esta obra.
¿Su adaptación es un diálogo con el texto original?
Mi adaptación es totalmente libre. Me he sentido libre a la hora de traer a nuestros días la historia de Argelino.
¿Qué ha reflejado del ser humano en 'Argelino, servidor de dos amos'?
La lucha de clases, como ya decía el sometimiento. La lucha no sólo del hombre si no de la mujer y de la violencia a la que la someten.
¿Algún otro drama de hoy sobre las tablas de La Abadía?
La dificultad de convivir en esta sociedad que hemos creado.
Alguna vez ha dicho que en el cine no ha encontrado todavía tu lugar, ¿qué te permite el teatro?
El teatro me da una libertad que no he conseguido encontrar en el cine. El teatro es mucho más personal, más familiar, más libre, no hay tanta presión económica.
¿No ha sentido la necesidad de subir al escenario del Teatro?
La verdad que siento envidia cuando les veo representar 'Argelino, servidor de dos amos'. En esta ocasión me ha tocado otro papel dentro de la compañía.

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